
El Liverpool está de vuelta y el calendario parece haberle tendido la alfombra roja. Este sábado, Anfield abre sus puertas para recibir al Wolverhampton, el equipo más débil de la Premier League, en un duelo que sobre el papel parece totalmente inclinado hacia los Reds… pero el fútbol siempre guarda sorpresas.
El equipo de Arne Slot vive su mejor momento de la temporada. Llega con tres victorias consecutivas, invicto en seis partidos y con la ilusión intacta de volver al Top 4, algo que se le escapó por diferencia de goles antes de Navidad. El triunfo ante el Tottenham confirmó el resurgir: carácter, fondo físico y una plantilla que empieza a responder en momentos clave.
Anfield, además, juega su propio partido. El Liverpool ha ganado 17 de sus últimos 20 encuentros ligueros entre Navidad y Año Nuevo, y su dominio como local en estas fechas roza lo intimidante. Todo parece alinearse para otra noche festiva.
Del otro lado está un Wolverhampton en crisis total. Últimos en la tabla, sin victorias en 17 partidos, con la peor defensa y el ataque más pobre del campeonato. Los Wolves están firmando una de las peores campañas en la historia reciente de la Premier League y llegan a Anfield con más dudas que certezas.
El historial tampoco ayuda: 16 derrotas en los últimos 17 enfrentamientos ligueros contra el Liverpool. Y aunque su entrenador confía en golpear primero —clave esta temporada—, hacerlo en Anfield parece una misión casi imposible.
Todo apunta a un solo escenario: dominio absoluto del Liverpool. Si los Reds mantienen el ritmo y la intensidad, este partido podría resolverse muy pronto.
Pronóstico: Liverpool 3-0 Wolverhampton
Una noche cómoda en Anfield… y una nueva señal de que el Liverpool va en serio en la pelea grande.