El UFC 242 del sábado 7 de septiembre en los Emiratos Árabes Unidos parece ser una cartelera de una pelea, dado que a pesar de que hay varios combates en PPV solamente el estelar ha despertado real interés. Después de ser una de las carteleras más comprada en la historia de Ultimate Fighting Championship, Khabib Nurmagomedov finalmente regresa para una pelea de unificación de título contra Dustin Poirier que se ubica como una de las mejores peleas posibles en el deporte en este momento. Más allá de eso, hay una revancha divertida entre Edson Barboza y Paul Felder que podría servir como cabeza de cartel para una tarjeta UFC Fight Night más pequeña hoy en día, pero de lo contrario, esta es básicamente una tarjeta rusa de nivel medio con algunas otras cosas.
Ahora a la vista previa de UFC 242 «Khabib vs. Poirier»:
Khabib Nurmagomedov vs Dustin Poirier en VIVO
Para Nurmagomedov, UFC 229 siempre será recordado por las locas consecuencias de que su campamento se metiera en una pelea gigante con la de Conor McGregor, pero dentro de la jaula, fue otro día en la oficina de «The Eagle», que salió victorioso en el más comprado pago por ver en la historia de MMA y lo hizo de manera unilateral. También marcó el ascenso de Nurmagomedov al trono como una de las estrellas más grandes de UFC. Ya popular en Rusia, su estatus como el florete más intimidante de McGregor hasta la fecha, y las secuelas de su pelea, le dieron más valor mundial, para bien o para mal. Si tan solo peleara más a menudo. A pesar de todo su éxito, la carrera de Nurmagomedov en UFC ha sido cruzada por las estrellas, dado que se estableció como un contendiente principal en 2014 con una victoria sobre Rafael dos Anjos. Después de esa victoria llegaron dos años de lesiones en la rodilla, y mientras Nurmagomedov regresaba a la contienda con victorias sobre Darrell Horcher y Michael Johnson, la imagen del título de peso ligero se puso en marcha cuando McGregor decidió encerrar a Floyd Mayweather. UFC 223 fue donde todo cambió desde el punto de vista profesional. Mientras que el enésimo intento fallido de reservar Nurmagomedov-Tony Ferguson resultó en que «El Águila» obtuviera el título de peso ligero contra Al Iaquinta, los titulares más grandes salieron de la jaula, mientras McGregor arrojaba una carretilla de mano por la ventana de un autobús de combate en un intento de llegar a Nurmagomedov. Para bien o para mal, eso repentinamente convirtió a McGregor-Nurmagomedov en la lucha del dinero, y de hecho, todos los involucrados ganaron mucho dinero en el circo que siguió. Desafortunadamente, las consecuencias de esa pelea llevaron a otro despido para Nurmagomedov, quien todavía ha sido neutralizado ocasionalmente pero nunca ha sido completamente probado. La buena noticia: en el papel, Poirier podría ser la prueba más dura de Nurmagomedov hasta ahora.
La historia de Poirier es una de superar la adversidad y evolucionar a lo largo de sus peleas. Vale la pena recordar cuán crudo era el nativo de Louisiana cuando se dirigió a Zuffa. Su debut en World Extreme Cagefighting se produjo solo 15 meses después de su debut profesional, y en cinco meses, se había trasladado a UFC. Un contendiente de la “Pelea del año” de 2012 contra Chan Sung Jung esencialmente convirtió a Poirier en una atracción imperdible, pero a lo largo de su carrera en el peso pluma, tuvo la sensación de que nunca podría superar el obstáculo de la verdadera contienda por el título. Después de una derrota en 2014 ante McGregor, Poirier decidió regresar a su clase de peso anterior a UFC en las 155 libras, y desde entonces, los resultados han sido sorprendentes. Al principio, fue tan simple como el corte de peso más pequeño que le permitió a Poirier pelear a un ritmo más rápido, ya que logró provocar una competencia dura como Diego Ferreira y Yancy Medeiros. Sin embargo, en sus últimas peleas, Poirier finalmente se ha convertido en el luchador que siempre quiso ser. Su encuentro de 2017 con Jim Miller representa la última vez que Poirier era abrumadoramente la versión anterior de sí mismo, dispuesto a responder a cualquier desafío encendiendo una pelea y poniéndose en peligro en el proceso. En los últimos más de dos años, Poirier ha sido un luchador más practicado, utilizando su diverso boxeo mientras siempre se mantiene consciente en la pelea. La versión 2016 de Poirier probablemente habría perdido las guerras contra Justin Gaethje, Eddie Alvarez y Max Holloway, pero las últimas tres peleas de Poirier lo han visto elegir sus lugares, derribar a sus oponentes y obtener las victorias. Eso le da la oportunidad de tratar de descubrir uno de los desafíos más difíciles en el deporte, y hacerlo sería una culminación increíble de años de arduo trabajo.
Poirier podría ser el tipo para lograr esto. La victoria de Nurmagomedov sobre Johnson se ha convertido en un punto clave en los años siguientes, principalmente debido al comentario de Joe Rogan, quien insistió en que Johnson había lastimado a Nurmagomedov mucho más de lo que realmente hizo. Si bien Johnson no causó un montón de daños, su velocidad de mano y su voluntad de lanzar volumen fueron suficientes para asustar a Nurmagomedov temprano, y es fácil ver a Poirier, que no cederá ante la primera señal de dificultad como lo hizo Johnson. ser capaz de lograrlo de manera más efectiva. Lanzar suficiente volumen efectivo para evitar que Nurmagomedov entre a voluntad será un factor muy importante para Poirier, como lo es su disposición a lanzar golpes al cuerpo como parte de sus combinaciones. La ventaja de cardio parece estar firmemente en la esquina del ruso, pero atacar su cuerpo abierto podría ser la clave para asegurarse de que se canse primero. Agregue que Poirier es un luchador lo suficientemente efectivo como para que pueda detener algunos de los intentos de derribo de Nurmagomedov, y hay muchas cosas que sugieren que el destacado estadounidense del Top Team puede ganar la mayor victoria de su carrera. Sin embargo, Nurmagomedov sigue siendo la elección más segura. «El águila» se puede pintar como un molinillo unidimensional, pero es un atleta legítimamente elitista con un mentón fuerte, dos hechos que probablemente dificultarán que Poirier anote el nocaut que probablemente necesite para crear la sorpresa. Una vez más, la ventaja cardiovascular parece estar firmemente en el rincón de Nurmagomedov. Sí, Poirier ha ganado guerras de varias rondas en sus últimas peleas, pero se ha agotado en las rondas posteriores. Incluso un plan de juego exitoso de Poirier requerirá gastar mucha energía, por lo que a menos que pueda lograr un final, las rondas del campeonato probablemente serán las mejores oportunidades de Nurmagomedov para avanzar en los derribos y hacer que sea su lucha. Poirier parece haber superado la mayoría de sus problemas mentales, pero aún será interesante ver cómo la amenaza de la lucha de Nurmagomedov lo afecta. Si bien el volumen y la agresión probablemente serán las mejores apuestas de Poirier, los oponentes de Nurmagomedov generalmente han tenido dificultades con la naturaleza contraintuitiva de tener que presionar a alguien que es tan fuerte para obtener derribos. Aún así, esta es la prueba más dura del campeón hasta el momento, ya que Poirier está preparado para ser Alexander Gustafsson para su Jon Jones o Chael Sonnen para su Anderson Silva, el tipo de oponente que obliga a un grande de todos los tiempos a cavar profundo y destriparse. una victoria Predicción: Nurmagomedov por decisión.
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