El 7 de enero de 2019, Gerardo Martino era presentado como nuevo técnico de la Selección Mexicana con la esperanza puesta en contar con un entrenador de renombre y con experiencia que ayudara al Tricolor a desplegar un mejor futbol y cumplir un buen proceso mundialista.
Sin embargo, después de un inicio prometedor con el título de la Copa Oro y varios partidos sin perder, las cosas comenzaron a salir mal y fueron acompañadas de un pobre desempeño futbolístico, que se fue agravando cada vez más, hasta terminar con el resultado que ya todos conocemos en Catar 2022, consumando la peor participación mexicana en 44 años.
Martino puso su renuncia en la mesa de la Federación Mexicana de Futbol en dos ocasiones: la primera tras caer en la eliminatoria ante Estados Unidos y Canadá de manera consecutiva y la segunda en junio de este año, tras la salida de Gerardo Torrado de la Dirección de Selecciones Nacionales.
Sin embargo, Yon de Luisa nunca aceptó la renuncia y siguió con el proceso hasta el final. Las tres derrotas consecutivas ante Estados Unidos, la no convocatoria de diversos jugadores como Javier Hernández y el muy mal futbol desplegado en la eliminatoria, fueron más clavos en el ataúd del «Tata», quien ya tenía una muy desgastada relación con varios sectores de la afición.
Justo antes del Mundial, la bomba terminó por explotar, cuando Martino dejó fuera de la lista final a Santiago Giménez, optando por Raúl Jiménez y Rogelio Funes Mori, que por cierto contaron con escasos minutos en el torneo.
Con la poca idea futbolística mostrada ante Polonia, el temeroso planteamiento ante Argentina y la primera eliminación en fase de grupos desde Argentina 1978, la era de Martino ha terminado, dejando un muy amargo recuerdo en toda la afición, que pidió su salida desde muchos meses atrás.
Etiquetas: Gerardo Martino, Qatar 2022, Selección Mexicana, Tata Martino Last modified: noviembre 30, 2022
