El Futbol Mexicano se caracteriza por no premier al mérito, pues rara vez, el mejor equipo del torneo es el que se termina coronando y si alguien sabe de eso, es precisamente el América; las Águilas han sido el equipo más regular de los últimos años, rompiendo récords y obteniendo tres lideratos generales en el Apertura 2021, Apertura 2022 y Apertura 2023, sin embargo, el título se les negaba.
Dolorosas eliminaciones ante Pumas, dos veces ante Chivas, ante Pachuca y ante Toluca, todas en el Estadio Azteca, hicieron que su afición muchas veces perdiera la esperanza en sus jugadores, sus técnicos y obviamente sus directivos.
Pero este año, la llegada de refuerzos estelares como Kevin Álvarez, Julián Quiñones y el arribo de André Jardine, un entrenador que desde el primer momento supo lo que significaba ponerse la camiseta americanista les devolvió la esperanza, pues el brasileño supo imprimirle su sello a un equipo que ganaba, gustaba y muchas veces también goleaba.
América ganó sus tres clásicos, se clasificó como líder de la competencia, anotó 50 goles, pasó por encima de sus rivales y aprendió a defenderse después de que esa fue su principal debilidad en las eras de Solari y Ortíz. Las Águilas llegaron a la Liguilla como el principal favorito a levantar el título y eso no les pesó, aprendieron de sus errores pasados y en esta Liguilla supieron sufrir y apretaron cuando tuvieron que apretar.
La 14 nunca estuvo en peligro, la duda estaba por lo vivido en eliminatorias pasadas, pero el América de Jardine tenía esa mística, ese extra que se necesita para jugar en un equipo de las dimensiones de los de Coapa y lo demostró conforme avanzaba el torneo y superando al sinodal más difícil: el mejor equipo de los últimos 15 años, un equipo de época que defendía su título y que a pesar de todo eso, nunca ha podido con los de Coapa.
Tigres ha amenazado con convertirse en uno de los grandes y muchos han comparado su historia con la del América, pero cada vez que se han medido en instancias finales, las Águilas les han demostrado que como ellos no hay dos y que para alcanzar la grandeza se necesita bastante más.
Hoy, América vuelve al sitio que le pertenece, al que aspira cada seis meses y al que se tardó cinco años en volver hoy el sabor es mucho más dulce, pues por primera vez se encuentran dos títulos arriba de su más cercano perseguidor y por lo menos durante un tiempo parece que no habrá discusión, el América es el más grande de México y cinco años después, ha vuelto a ser Campeón del Futbol Mexicano.
